En días pasados compartí un artículo en el grupo Directorio de Escritores Costarricenses, en Facebook. Lo he traducido con el fin de que los pasos por seguir en el ambiente literario en cuanto a publicación se refiere sean analizados por los poetas jóvenes. He adaptado algunos elementos al contexto costarricense y he complementado el texto con varias notas. No es una guía exhaustiva, pero toca aspectos sumamente relevantes, a los cuales se les debe prestar atención. Sirve para poesía como para cuento, y en general puede ayudar también a los novelistas.
Cómo publicar un libro de poesía(1)
Me llegan muchas consultas acerca de cómo publicar libro de poesía, promocionar un libro y hacer la correccion de texto. Primero, no muchos editores lo hacen (publicar poesía.) Financieramente no es prudente. Así que como poeta, pensá por un minuto desde el punto de vista del editor.
Vos no tenés oportunidad de publicar un libro de poesía a menos que tengás un nombre como poeta, o que seás un escritor reconocido que además escribe poesía. O que seás un reconocido jugador de fútbol, una estrella del baloncesto o una figura de la televisión o al menos que tengás alguna otra razón que te dé fama y que además escribás poesía. Entonces, ¿cómo te convertís en un poeta algo más consolidado sin tener un libro publicado?
1. Comprá y leé el trabajo de poetas cuya obra haya sido publicada. Hacé esto regularmente. Fijate qué está pegando, qué está sucediendo. Suscribite al menos a una revista literaria. Podés buscar mucha información en Internet.
2. Asistí a lecturas públicas de poesía. Algunos ejemplos en Costa Rica: presentaciones de libros todas las semanas, lecturas en librerías como la Internacional, Lehmann o Libros Duluoz, Contratapa. Libros, Arte & Café; recitales, conferencias y actividades similares en centros culturales, como el Farolito, el Instituto México o la Alianza Francesa; o en bares y restaurantes como El Lobo Estepario o El Sótano; festivales de poesía y encuentros literarios. Te podés enterar de todo esto uniéndote a listas de correo de librerías o de sitios web dedicados a la cultura, así como siguiendo blogs literarios y participando en grupos de escritores en redes sociales.
3. Enviá tu trabajo a revistas literarias. Aunque en Costa Rica hay muy pocas impresas, las opciones en Internet son muchas y variadas. Buscá en Google la información de las siguientes publicaciones para encontrar información de contacto: Revista Nacional de Cultura, Conjetura, Cultura CR, La Mandrágula, Art Studio Magazine, Áncora, La Musaraña, 400 Elefantes, Las Malas Juntas, Letralia, Isla Negra, El Malpensante, Ping Pong, Traviesa, Círculo de Poesía. Hay muchas otras revistas y en línea podrás encontrar más.
4. Debés tener al menos 10 poemas publicados en tres revistas de poesía o más –impresas o electrónicas–, antes de gastar dinero para que alguien más reseñe tu trabajo profesionalmente.(2) Como editor también puedo decir que es mucho más fácil trabajar con poetas que han publicado bastante, pues ellos comprenden el proceso de edición y no están a la defensiva a la hora de editar su trabajo o de buscar maneras de mejorarlo.
5. Antes de someter tu libro a una editorial, pedile a un poeta publicado cuyo trabajo te guste o admirés que lea tu manuscrito. Deberás pagarle para que lo haga y que en su opinión te diga si es publicable.(3) Podés tomar un curso de escritura creativa sea en una universidad o bien un curso corto en alguna otra institución.(4) En otras palabras, obtené realimentación y reacciones a tus poemas.
6. Cuando hayás llegado a esta etapa, podés buscar recomendaciones de personas del medio para que editen tu trabajo (de nuevo, tendrás que pagar por ello). El costo es variable.(5)
7. Si podés decir “sí” a todos los pasos anteriores, entonces tenés que revisar tu colección de poemas y escoger los que de alguna manera formen una unidad. Un primer libro que pueda ser adecuadamente publicado como un volumen delgado requiere entre 56 y 64 páginas. Pero recordá que el libro será diagramado y que necesitará al menos siete u ocho páginas para portada interna, página legal, epígrafes, índice y colofón.
Si no podés encontrar una editorial, es aceptado lanzar una edición de autor. Es más complicado(6) y menos prestigioso, pero al menos lograrás lanzar tu obra y así podrás encontrar lectores o los lectores te encontrarán. No dejés de cumplir ninguno de los pasos del uno al seis, o tu libro no será tan bueno como debería.(7)
Editoriales en Costa Rica que publican poesía: Editorial Costa Rica (ECR), Editorial Universidad Estatal a Distancia (Euned), Editorial Universidad de Costa Rica (Editorial UCR), Editorial Universidad Nacional (EUNA), Editorial Germinal, Ediciones Espiral, Editorial Arboleda, Uruk Editores, Ediciones 77, Ediciones Perro Azul o Ambigú.(8) Algo importante es que cuando usted se dirija a una editorial, sepa qué tipo de libros publica, para que ni usted ni la editorial pierdan su tiempo.
Liesl Jobson ofrece las siguientes percepciones:
Gus Ferguson siempre dice que hay más gente que escribe poesía que gente que la lea. Triste pero cierto. Arthur Attwell señala (y esto va para cualquiera que desee lograr que se publique cualquier tipo de trabajo novel) que si no leés montones y montones y montones de poesía, ni siquiera se te ocurra intentar publicar.
[…]
La tenacidad requerida para lograr esos objetivos muestra a las potenciales editoriales que el poeta ha hecho el recorrido necesario para ser publicado y que ha probado el rechazo y lo ha superado. También significa que cuando un volumen de poesía es publicado podrá haber varios medios que se puedan acercar para decir “hurra” o incluso mejor, hacer una reseña.(9)
Notas
(1) Aquí el texto original
(2) En Hispanoamérica no es común pagar, lo cual es propio de un medio más profesional como el anglosajón. Sin embargo, nunca sobra estar dispuesto a hacerlo, o al menos no enojarse si un medio cobra por lo que finalmente es publicidad.
(3) Podemos decir lo mismo que en la nota anterior. Empezar a pagar lejos de representar una visión mercantilista, aporta dignidad al trabajo.
(4) En la Universidad de Costa Rica hay cursos de teoría y creación literaria, impartidos por Julieta Dobles (en Estudios Generales) o Carlos Villalobos (en la Facultad de Letras). También, el Colegio de Costa Rica ha estado impartiendo talleres diversos. De igual forma, hay talleres privados o independientes, como el de Luis Chaves, el de G.A. Chaves, el de Germán Hernández, el de Alfredo Trejos o el de mi persona. También hay grupos literarios como el Círculo de Poetas Costarricenses, Poiesis, Ceniza Huetar (San Ramón) o El Sur También Existe (Pérez Zeledón).
(5) Igual que en las notas 2 y 3. Sin embargo, la revisión filológica sí es comúnmente remunerada.
(6) Hay que distinguir entre una revisión filológica y una edición. La primera puede que se limite a problemas ortográficos, gramaticales y de estructura; la segunda solo podrá hacerla alguien con experiencia en dicho campo, quien probablemente sea además un escritor. Si usted busca un «filólogo», converse sobre lo que usted quiere realmente, para evitar revisiones superficiales que no le ayudarán nada en su poesía; y si se ponen de acuerdo, exíjale un informe detallado de su trabajo.
(7) Yo agregaría la posibilidad de probar en concursos. Tanto en Costa Rica como en el extranjero hay gran cantidad de certámenes, y aunque suelen ser una especie de lotería, no dejan de ser una oportunidad. Un inconveniente es el desembolso que se debe hacer cuando hay que sacar varias copias y enviar por correo postal. Sin embargo, ahora hay cada vez más concursos que permiten el envío de forma electrónica. Una vez más, una pesquisa en Internet nos permitirá obtener información detallada. Es importante saber a qué tipo de concurso se envía el trabajo.
(8) La editorial estatal y las editoriales universitarias publican la obra por su propia cuenta y dan al autor un porcentaje de ejemplares (entre 10 y 20 dependiendo del tiraje, que puede ir de 250 a 1000) y un porcentaje de ganancias por derechos de autor, que varía entre 10 y 12,5 %. Las editoriales privadas o independientes tienen diversas modalidades que pueden surgir de común acuerdo entre ellas y el autor. Es común que en algunos casos el costo o parte de este recaiga en el autor.
(9) Una vez más, en Costa Rica son pocos los espacios publican reseñas, pero sí es posible que otro escritor, un periodista o un académico se interese en tu trabajo y le dedique una nota, un artículo o hasta una tesis.